Un año más, Arrels Sant Ignasi y Cáritas Diocesana de Lleida han participado en la campaña de temporeros de la ciudad de Lleida a los Pabellones 3 y 4 de Feria de Lleida. Este año la implicación de las entidades ha estado en la gestión de la acogida y en el servicio de comedor.
En total, unas sesenta personas voluntarias se ha implicado y seis personas contratadas más han liderado el equipo técnico durante todo el periodo, que se ha extendido desde principios de julio y hasta medios de septiembre. La crisis sanitaria ha evidenciado la realidad de este col•lectivo y ha puesto de manifiesto la necesidad de un nuevo modelo de acogida de personas temporeras en la ciudad de Lleida.
Desde Arrels Sant Ignasi y Cáritas Diocesana de Lleida se hace una valoración muy positiva de la implicación de todas las personas que voluntariamente han participado de este proyecto, especialmente entre los jóvenes, hecho que demuestra cómo buena parte de la sociedad leridana se siente interpelada en la necesidad de encontrar una solución a una situación que se repite cada verano. Aun así, las entidades también hacen patente que el actual es un modelo caduco y que no soluciona el problema de raíz, y emplazan a todas las administraciones y a los varios agentes sociales implicados a empezar cuanto antes mejor,un trabajo conjunto que dé lugar a la creación de un modelo de acogida integral, establo, de futuro y digno para todas las personas.
En esta línea, Arrels Sant Ignasi y Cáritas Diocesana de Lleida consideran que es momento de poner cimientos para que en la próxima primavera no se vuelva a producir una coyuntura similar, una realidad que hace demasiados años va sucediéndose en la ciudad de Lleida. Y es que las entidades muestran preocupación por la forma improvisada con que se ha abordado la situación, teniendo que multiplicar esfuerzos para poder dar una respuesta adecuada, todo y las dificultades añadidas por la Covid-19.
Esta es una de las reivindicaciones que se viene haciendo desde hace casi 20 años, periodo en que se ha trabajado por la acogida de personas que llegan para trabajar en la campaña. Entre todos y todas hace falta dirigir los esfuerzos porque Lleida sea, verdaderamente, una ciudad de acogida y hospitalaria, con el objetivo que las personas trabajadoras que llegan a nuestra ciudad encuentren el apoyo y el acompañamiento necesarios para vivir la campaña con condiciones humanamente dignas.