Nació en Puerto de Santoña (Cantabria) el 8 de Septiembre de 1762 y fue bautizado al día siguiente. Estudió en la Universidad de Oñate (Álava) donde ejerció de profesor de leyes y rector.

Presbítero desde 1786, fue canónigo, chantre y abad, durante 24  años, de la colegiata de Villafranca del Bierzo, “nullius diócesis”.

El rey Fernando VI le presentó al Papa Pío VII como propuesta para ocupar la mitra leridana. Finalmente recibió el episcopado en Madrid el 20 de Junio de 1819 y tomó posesión del obispado de Lleida el 16 de Septiembre de 1819.

Después de la guerra contra el francés, Lleida tenía una población de unos 18.000 habitantes. Durante esta guerra la ciudad y la catedral fueron saqueadas bajo el grito de “l´argent, l´argent...!”. En aquellos momentos en la catedral había unos 90 clérigos: canónigos, racioneros, capellanías, beneficiados, salmistas... Las rentas del obispo eran de unos 300.000 r.v., gravadas por S. M. en 1/3 en pensiones ad libitum.

El comandante Rafael Riego – que había estado en Lleida – el día 1 de Enero de 1820, en Cabezas de San Juan (Sevilla) proclamó la Constitución de Cádiz (1812). No la aceptó todo el mundo. Rentería fue uno de los opositores. Se opuso a una larga lista de disposiciones gubernamentales liberales de clara y abusiva intromisión en la vida interna y externa de la Iglesia española. Sus escritos pro ecclesia et patria, enviados a S.M. y al gobierno de Madrid, los titulaba “Representaciones…” y estos le merecieron diversas medidas de represalia. Las publicó “para la instrucción del Clero y pueblo de su diócesis”. 

Esta oposición le costó una accidentada expulsión de Lleida:

• Una serenata nocturna ante el palacio ubicado en la calle Tallada,
• Encarcelado en la iglesia de San Pedro, en la calle Mayor de Lleida,
• Expulsado el 13 de Febrero de 1823 y enviado a Barcelona; fue custodiado por milicianos. Durante este viaje, y mientras se encontraban en Tárrega, se hizo una votación por si le mataban o no. Por mayoría de un voto ganaron los milicianos salvadores.
• En Barcelona, encarcelado en el parque de la Ciudadela. A media noche le escondieron para salvarle la vida. El asesinado fue el obispo de Vic, Ramón Strauch, O.F.M
• Expulsado a Tarragona y Málaga, siempre por mar. 

El 23-XI-1823 volvía a Lleida. Como premio, Fernando VII le concedió la cruz de Carlos III y el arzobispado de Santiago de Compostela. Durante el viaje hacia la nueva ciudad el Obispo Rentería murió en Madrid, el 4 de Octubre de 1825. Fue enterrado en el monasterio de monjas agustinas de la Encarnación, en Madrid.

Mn. Ramiro Viola González