|07-02-04| Mossén Paco Ribas Fragero fue elegido el pasado 14 de diciembre nuevo presidente del cabildo de la Catedral, en sustitución de Mn. Gerard Solé, y el obispo Salvador firmó el nombramiento el 7 de enero. Con motivo de este nuevo cargo, la Delegación de mediados de Comunicación del Obispado ha entrevistado a Mn. Paco para conocer cuáles serán sus objetivos como responsable de la Catedral y cuál es su papel.
-Cómo se escoge la figura de presidente del cabildo?
En una reunión entre los Canónigos que forman el Cabildo se elige el presidente cada cuatro años. Hay poca disponibilidad de sacerdotes, tienen mucho trabajo, muchos son mayores y se tiene que intentar que el escogido no renuncie dentro del periodo que dura el cargo. Entonces, de los más jóvenes, algunos tienen más trabajo que otros y creo que por eso me escogieron. Tengo 57 años. Se tiene que rezar para que haya más vocaciones sacerdotales.
-Qué tareas hacía hasta ahora?
Yo a la Catedral ya era fabriquer, el encargado de la conservación, el mantenimiento y del patrimonio del edificio, como las obras que están cedidas al Museu de Lleida, y también era el archivero y secretario. También lo continúo siendo. Como fabriquer, uno de los trabajos que se tiene que hacer es conservar el tejado de la Catedral teniendo en cuenta los nidos que hacen las cigüeñas, que pesan unos 150 kilos. Entonces, en ciertos periodos del año pedimos permiso en Medio Ambiente para limpiar el tejado fuera de la época de la nidificación de estas aves. Por otro lado, soy el consiliario de la Hospitalidad de Lourdes, estoy en el colegio Lestonnac, en la parroquia de Sant Martí, con las monjas de La Milagrosa y en el hospital Arnau de Vilanova. En el hospital nuestra presencia es necesaria y siempre hay un flujo de gente en la capilla, donde hacemos misa diaria a las 17.30 horas.
-Qué significa ser el presidente del cabildo de la Catedral?
La Catedral es la parroquia del Obispo y también tiene que ser referente en hacer una liturgia bien celebrada basada en las normas de la Iglesia. Es verdad que cada vez vivimos en una sociedad más atea y separada de Dios y muchas veces los sacerdotes, para intentar acercarse a la gente, hacen misas más amenas y entretenidas aunque tengan que cambiar lo que dice la liturgia. Entonces, para que no se olvide que en la Eucaristía se recuerda que el Señor derramó su sangre para nosotros, esto tiene que quedar claro y no que la misa es un lugar para disfrutar. Por este motivo, desde la Catedral nos centramos en lo que manda la Iglesia y que el resto de parroquias lo tengan en cuenta, así como en celebraciones matrimoniales o bautizos.
-Como nuevo presidente, qué cosas tiene previstas para acercarse a la gente?
-Cuáles son las necesidades pastorales que tienen?
Las de atender a las personas necesitadas. Lo hacemos junto con Càritas.