Representantes de 25 centros de Lleida de la Fundació Escola Cristiana de Catalunya (FECC) se reunieron ayer en el colegio Santa Anna para debatir la creación de un marco estratégico que dé respuesta a las necesidades educativas del futuro. Joan Mateo, coordinador del debate y catedrático de Educación, defendió que “las administraciones públicas no podrán dar una buena respuesta sin la participación de varios agentes y por eso el rol de la escuela concertada en Catalunya será importante parar atender con calidad las demandas sociales de la educación”. En Lleida, la concertada escolariza a casi la cuarta parte de los estudiantes.

Por su parte, Meritxell Ruiz, secretaria general de la FECC, remarcó que han creado un grupo de trabajo para “volver a ser referentes a nivel educativo y pedagógico, porque como escuelas concertadas tenemos una responsabilidad hacia la sociedad, que ha de ser crear oportunidades educativas de calidad para todos los alumnos”. Precisamente para poder ofrecer esta calidad, la concertada lleva tiempo reclamando más recursos. “El 60% de los gastos de una escuela concertada, en luz, agua o wifi, por ejemplo, y un 20% del profesorado lo pagan las familias.

Es evidente que eso no puede seguir así y lo reclamamos con intensidad, porque las familias no tienen porqué pagar lo que deberían tener gratuitamente”, indicó. Apuntó que esta es “una línea de trabajo paralela con el departamento, que no forma parte del actual debate” e incidió en que plantean trabajar para “hacer un reimpulso pedagógico y ejercer un liderazgo educativo en Catalunya”. En este sentido, Ruiz remarcó que “queremos potenciar un ecosistema de calidad formado por nuestros 400 centros con instrumentos como la formación, la evaluación y la innovación para la mejora de los resultados educativos”, así como “contribuir a generar equipos directivos y docentes altamente cualificados”.

Durante el curso, las escuelas cristianas elaborarán el marco estratégico y lo presentarán el próximo año.Asimismo, quiso dejar claro que “se nos considera escuelas elitistas y no lo somos”. Argumentó que escolarizan también a alumnos vulnerables y apuntó que Educación no les ha abonado aún la financiación correspondiente.

(texto: Sònia Espín, diari Segre)