|22-10-25| El sábado 18 de octubre, una veintena de religiosas y religiosos del Obispado de Lleida realizaron una salida al Santuario de la Cueva de San Ignacio de Manresa. Durante la visita, pudieron admirar la treintena de murales monumentales de mosaico que representan la Historia de la Salvación, desde el Paraíso Terrenal hasta la venida del Espíritu Santo.

 

El grupo celebró la eucaristía en la misma cueva donde San Ignacio de Loyola residió más de un año y donde escribió sus conocidos Ejercicios Espirituales.

 

Después de comer, algunos de los participantes se desplazaron hasta el Pozo de la Luz, lugar donde, según la Autobiografía de San Ignacio, el fundador de la Compañía de Jesús vivió la iluminación más grande de su vida.