A las 9 de la mañana del 25 de julio, como es costumbre el día de la fiesta de Sant Jaume, se celebró una Misa en la pequeña capilla del Peu del Romeu, en la calle Mayor, la única celebración eucarística que se celebra anualmente en este lugar. La capilla es el lugar más emblemático de Lleida en referencia al Camino de Santiago y de la fiesta de los Fanalets.
Dice la leyenda que fue en este lugar donde el Apóstol se clavó un pincho en el pie y que fueron los ángeles con lámparas de luz, quienes le auxiliaron.
La Misa estuvo organizada por la Agrupació Ilerdenca de Pessebristes, que tiene en ella su sede. Estuvo presidida por Mn. Vicenç Alfonso, consiliario de la entidad, concelebrando el franciscano P. Joaquim Recasens, con ocasión de celebrarse este año el 800 aniversario del paso de San Francisco de Asís por Lleida, camino de Santiago de Compostela. San Francisco es a la vez el patrono de los pesebristas.
En su homilía, Mn. Vicenç Alfonso se refirió a las raíces del Camino de San Santiago en Lleida y como el Peu del Romeu conserva la tradición del paso del apóstol por nuestra ciudad, para llevar a los leridanos el Evangelio de Jesús. En este sentido Mn. Vicenç dijo: “La nuestra es una fe apostólica”.
En el momento de la Plegaria de los Fieles, se hubo una plegaria especial por las víctimas de los aviones de Ucrania y Malí, así como otra para pedir la paz por el mundo y, muy especialmente, por Palestina, la tierra de Jesús y de Sant Jaume. Se rogó también por las víctimas del accidente de tren de Santiago, al cumplirse el primer aniversario de aquel suceso.
Al finalizar la Misa y cómo es costumbre se cantaron los Gozos a Sant Jaume de los Fanalets.
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